Renzo Celedón: La Concertación en tiempos de Outplacement

Estimados:

Quiero basarme en este concepto para el desarrollo de este articulo, espero no se me trate de calificar de analista ni tampoco de inteligente, opinante y de gran consejero, ya que existen personas con mucha experiencia y una vasta trayectoria para desarrollar este rol, espero  se tome como una persona que le gusta capturar  los aprendizajes y rescatar la mejor lección de estos. Bueno para no desviarnos del tema este concepto  trata sobre la orientación y la inserción laboral, que se hace más creciente en  tiempos de alternancia. El libre comercio y la competitividad en la era de la globalización,  las privatizaciones y porque no decirlo la pérdida del poder político son algunos de los generadores de Outplacement. En  países desarrollados, hay consultores que se dedican a la asesoría de grandes empresas sobre como desvincular y dar orientación a las personas ofreciendo alternativas de ocupación.

Cuando la Concertación llego al poder post plebiscito, auguro muchas esperanzas, para quienes con perseverancia y compromiso conquistaron el poder a través del voto, entonces renace de los escritos de la orden política, el Operador Político quien trata de  mantenerse y  sobrevivir en estas aguas turbulentas del hoy. Puedo definir este tipo de rol  político, como la personal hábil, ser locuaz que cumple misiones estratégicas y especialmente en épocas electorales son indispensables, para el manejo territorial y la penetración de marcas políticas, siempre están detrás del poder, por lo general no ostentan cargos de alto perfil trata de pasar lo más desapercibido posible, pero  esta es la definición romántica ya que con el tiempo fueron naciendo otros derivados de este concepto que procedo a comentar, basado en la escaza literatura existente,  podemos clasificar al Operador en tres tipos:

El Operador Pensante, Sujetos de buen pelaje, inteligentes, profesionales, con independencia económica (a veces de mucha plata), pero que mueven los hilos de las marionetas (militantes disciplinados) inspirados ni siquiera por móviles partidistas, sino porque les gusta el muñequeo y les fascina sacar y poner peones del tablero público. Viven articulando y desarticulando entidades, buscándole las cinco patas al gato para hacer cambios. Se vanaglorian de sus contactos del más alto nivel y siempre parecen estar enterados de todo. 

El Operador chanta, Siempre andan detrás de un sueldo (no de trabajo) y son ubicados generalmente en cargos ambiguos y poco precisos en cuanto a sus misiones (encargados de comunicaciones, coordinadores, relacionadores, asesores comunicacionales, jefes de estudios, etc.) Lugares donde nunca deben responder por resultados concretos. Son servidores públicos que no sirven a nadie. Bueno, rectifico, sirven solo a su patrón.

El Operador Goma es un tipo cuya preparación política es muy baja. No le da para ser líder de nada en su partido por lo cual, como militante disciplinado que es, se pone al servicio de aquel, con la sana intención de alcanzar su máxima aspiración: estar en el poder aunque sea de soslayo, medio pupilo, pero amparado por algún padrino, mentor o protector poderoso, del cual se convierte tan pronto lo pone en un cargo, en su esclavo blanco.

Pero destaco que este fenotipo social tiene merito o algo de él, ya que existe trabajo justificado en la causa, de alguna manera se gana su cuota de poder, o se logra identificar con algo. Muchos de ellos se encontraban en el aparato central del poder, que  lamentablemente han tenido que dejar, difícil situación, ya que las alternativas laborales para algunos operadores se complica, no todos terminaron sus estudios, algunos solo se acostumbraron a la articulación política remunerada, no ejerciendo un oficio o profesión.  

Pero existe un gran masa laboral que se fue generando y acumulando en los gobiernos de la concertación, reclutados por la Clase Política, como decirlo pueden ser parientes, amigos, bulchiteros, políticos come pan, niños o niñas de alta alcurnia, que sin merito y cero preparación política construyeron su vida alrededor del poder, con los mejores cargos y los mejores reguleques sueldos, en fin podría estar todo este articulo describiendo o desclasificando esta grasa del poder, que podríamos definirla a agruparla en los conceptos de cortesanos y vasallos del poder. Creo que este último espectro social es el más impactado por los acontecimientos, el 2010 existieron alrededor de 7.000 despidos en el sector público, campo de desarrollo y crecimiento de este tipo de personajes.

Las alternativas laborales son , el mundo privado donde supuestamente se hacen las cosas bien y parte del mundo público, es decir, los gobiernos municipales, que se ven afectados aumentando sus dotaciones, en pos de salvar la vida a cortesanos y vasallos, pocos se inclinan por el sector privado, solo aquellos cortesanos y operadores con mucha red de contactos. Pero se está dando un fenómeno que representantes de la concertación trabajan en el nuevo gobierno y hacen oposición al gobierno saliente, es raro pero se está dando, a lo mejor los intereses se están convirtiendo en intereses individuales comunes y transversales.

Es por eso que el Outplacement se acentúa en la debilitada Concertación,  es importante  que el conglomerado se ordene y logre abordar el proceso de desligamiento del poder de sus colaboradores, para reducir el conflicto emocional, orientar a las personas sobre cómo aprovechar sus fortalezas, definiendo objetivos y planificando su carrera laboral.

Asistimos a una crisis de representación, la gente esta desafectada de los partidos políticos y sus representantes (del lado que sea), los cuales han sido vínculos tradicionales con la representatividad. Existe una profunda desconfianza de los que ejercen el poder y del sistema de poder que estos conforman.

Creo que la marca política Concertación le queda poco, ya que por mucho tiempo se convirtió en un gran empleador y no en un conglomerado con intereses de país, esta así la cosa, me quedo claro en la última Junta  Nacional de la DC, que es otro artículo que desarrollar.