“Algunas veces te pasan cosas que parecen horribles, dolorosas e injustas, pero en realidad entiendes que si no superas estas cosas nunca hubieras realizado tu potencial, tu fuerza, o el poder de tu corazón”.
Algunas veces las personas llegan a nuestras vidas y rápidamente nos damos cuenta de que esto pasa porque debe de ser así para servir un propósito, para enseñar una lección, para descubrir quiénes somos en realidad, para enseñarnos lo que deseamos alcanzar.
Tú no sabes quiénes son estas personas, pero cuando fijas tus ojos en ellos sabes y comprendes que ellos afectarán tu vida de una manera profunda.
Algunas veces te pasan cosas que parecen horribles, dolorosas e injustas, pero en realidad entiendes que si no superas estas cosas nunca hubieras realizado tu potencial, tu fuerza, o el poder de tu corazón. Todo pasa por una razón en la vida. Nada sucede por casualidad o por la suerte…
Enfermedades, heridas, el amor, momentos perdidos de grandeza o de puras tonterías, todo ocurre para probar los límites de tu alma. Sin estas pequeñas pruebas, la vida sería como una carretera recién pavimentada, suave y lisa, una carretera directa sin rumbo a ningún lugar, plana, cómoda y segura, mas empañada y sin razón.
La gente que conoces afectan tu vida, las caídas y los triunfos que tú experimentas crean la persona que eres. Aún se puede aprender de las malas experiencias. Es más, quizás sean las más significativas en nuestras vidas. Si alguien te hiere, te traiciona o rompe tu corazón le das las gracias porque te ha enseñado la importancia de perdonar, la confianza y a tener más cuidado de a quien le abres tu corazón.
Si alguien te ama, ámalos tú también no porque ellos te aman sino porque te han enseñado a amar y a abrir tu corazón y tus ojos, a las cosas pequeñas de la vida. Haz que cada día cuente y aprecia cada momento además de aprender de todo lo que puedas, porque quizás más adelante no tengas la oportunidad de aprender lo que tienes que aprender de este momento. Entabla una conversación con gente que no hayas dialogado nunca y actualmente escúchalos y presta atención.
Permítete enamorarte, liberarte y poner tu vista en un lugar bien alto. Mantén tu cabeza en alto porque tienes todo el derecho de hacerlo. Repítete a ti mismo que eres un individuo magnífico y créelo. Si no crees en ti mismo nadie más lo hará tampoco. Crea tu propia vida, encuéntrala y luego vívela…
Finalmente, estamos viviendo momentos polarizados porque estamos escuchando a diferentes personas que quieren compartir, persuadir, a través de sus ideas, valores, y pensamientos. Cada uno de nosotros sabemos qué es lo que queremos, no dejando que influyan en nosotros, sino que nos dejen seguir buscando la perfectibilidad para nuestras vidas.
* Profesor. Maipucino.
Las opiniones vertidas en este espacio son responsabilidad de cada autor/a y no representan necesariamente la línea editorial de laBatalla.
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