El ex CORE por Maipú, Estación Central y Cerrillos Freddy Campusano nos regala este “Relato nostálgico de un joven idealista DC en el comando Maipú del “No”, ese 5 de octubre de 1988”.
Por Freddy Campusano.
Corría el año 1987/1988, y en mi calidad de militante de la JDC me correspondió participar activamente en el comando comunal del “No”, específicamente en el equipo territorial de campaña, que dirigía el ex concejal Héctor Canales Morales (q.e.p.d) y que en su mayoría ese comando estaba integrado por jóvenes de la JDCMAIPU que presidía en ese entonces Paulo Serrano Matus.
El comando central del “No” de Maipú estaba dirigido por los presidentes de los partidos políticos de ese entonces, y que en el caso de la DC, lo encabezaba Herman Silva como presidente y ocupaban cargos también en esa instancia Humberto Salas y Octavio Burotto, las reuniones se desarrollaban en las oficinas del PRSD ubicado a un costado del centro fotográfico Farfán, ahí en la calle 5 de abril.
Eran momentos muy complicados, pues era muy difícil hacer campaña de manera libre y el temor era imperante en ese tiempo, yo con solo 19 años y con una convicción y marcado entusiasmo participaba activamente de ese proceso y fue así que nos volcamos a la calles de Maipú y empezamos a concentrar apoyos y mística en los vecinos y vecinas de Maipú.
De ese comando territorial DC del “No”, con valentía y con el único propósito de que por la vía del voto en las urnas recuperáramos la democracia para nuestro país. Ahí estaban Paulo Serrano, Abraham Donoso, Eduardo Muñoz, Orietta Aracena, Hernán Cubillos, la mami Eliana Muñoz, Don Mario Ortiz Quiroga, Ricardo Lagos, Jeudiel Rojas, Nelson Zúñiga, los 4 hermanos Aguirre Santiago, Francisco Rojas, Guillermo Quiliñan, Marcelo Toro, José Canquil, Jeannette Cárdenas, Abelardo Méndez, Gerardo Méndez, Juan Gajardo, las Hermanas Droguett, Herman Silva hijo, Francisca Silva, Fernando León, Clara Arcos, Celinda Huerta y tantos otros que se me pueden olvidar y que fueron parte de ese trabajo sistemático y efectivo en la calle y junto a los otros partidos construyendo la esperanza de un nuevo Chile y un nuevo Maipú.
Previo al 5 de octubre de 1988, todos nosotros trabajamos aparte del tema territorial en capacitar y enseñar a votar a miles de maipucinos, pues necesitábamos miles de apoderados para cuidar el día D, pues entendíamos que había que copar todas las mesas de votación y en un trabajo titánico instalamos apoderados del “No” en todas las mesas, yo en ese entonces fui llamado a ser vocal de la mesa 20 de varones, donde he votado toda mi vida y en esa tarea vigilar que el proceso se llevara de la mejor manera posible.
Había nerviosismo y mucha ansiedad en todos esa histórica mañana. Al llegar al local de votación, en ese entonces me correspondió votar en lo que era la Dirección de Aseo y Ornato en la calle Maipú, nos mirábamos y nos hacíamos señas, pues había un ambiente muy tenso. En el caso de Maipú el “Sí” colmó todas las mesas y ellos tenían más seguridad y facilidades en el espacio de votación. Llegue a las 6:00 a. m. y asumí mi tarea de vocal de mesa y al avanzar el día con miradas cómplices entre los miembros de la mesa me daba cuenta que todos éramos del “No”, eso sin duda permitió tener la absoluta confianza de que el triunfo era inminente, pero siempre con la preocupación de que el gobierno no reconociera el triunfo del “No”.
“Y llegó la hora del escrutinio y el cosquilleo del estómago nos invadía a todos quienes teníamos la responsabilidad de leer el resultado final en cada mesa… En mi mesa ganó el “No” con 221 votos y el “Sí” con 98 votos, guardo intacto esas cifras hasta el día de hoy y al escuchar las mesas aledañas cómo se imponía el “No”, la alegría y la efervescencia colectiva se empezaba a adueñar del lugar, los rostros de los partidarios del “Sí” se veía el amargor y la tribulación del momento. Para quienes estábamos ahí, no había duda alguna que el “No” ganaba ampliamente en Chile, pero eso al parecer el Sr. Cardemil no lo sabía pues en sus cómputos previos daba ganador al “Sí”.
En la noche cuando el General Matthei reconoce públicamente el triunfo del “No” estalló la algarabía y la alegría de todos quienes estábamos cerrando los procesos electorales en los locales de votación y a la Plaza Italia los pasajes como se dice en buen chileno y dar por culminado el periplo de un proceso que me marcó como ciudadano, vecino de Maipú y como chileno.
La historia juzgará los efectos de esta democracia imperfecta y la débil transición que hemos transitado estos 30 años, pero en mi caso, como joven idealista y comprometido con el objetivo sí me tocó esa esperada “ALEGRÍA”.
Finalmente en lo formal, el referéndum en Chile lo ganó el “No” con un 53% contra un 44% del “Sí”. Con esto, la ciudadanía rechazaba el candidato propuesto y se debía convocar a elecciones presidenciales y parlamentarias para el año 1989.
Luego de esto, con un nuevo presidente en Chile elegido en las urnas, se iniciaba un período conocido como la transición a la democracia y que hoy requiere muchos mas “No”. “No” a la Constitucion del ’80, “No” a las AFPs, “No” a la discriminación, “No” al femicidio, “No” a la venta del litio, “No” perdonazos a la corrupción, “No” a la intolerancia, “No” a Sonacol y todos los “No” que me mueven en política.
!A cuidar nuestra democracia, para que nunca más en Chile!
La Batalla, de Maipú hacia el Mundo.
victor dice
Habian dos lineas de cómputos paralelos ese día, una a cargo de la DC y Radicales y en la otra estábamos los socialistas y PPD y compañeros comunistas. Al menos por ese día no había vinculación entre ambas por razones de seguridad, ya que no teníamos certezas de como reaccionaría la dictadura y si había alguna acción represiva, que al menos una de ellas logre el cometido de tener datos precisos de la votación.
El centro de cómputos en el cual participé estaba en calle Pozo Almonte por esquina blanca pasado segunda transversal y hasta allí llegaban jóvenes en bicicleta a dejar los cómputos por cada mesa.
Dia emocionante y lleno de esperanzas. Un orgullo haber sido parte de eso.