El Quinto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó a Javier Concha a 4 años de presidio, con el beneficio de la libertad vigilada intensiva, más la inhabilitación perpetua para derechos políticos y la inhabilitación para cargos y oficios públicos durante el tiempo de la condena.
Esto, como autor del delito de lesiones graves perpetrado en mayo del 2016 en Maipú.
El tribunal ya había dado por acreditado que la tarde del 8 de mayo de aquel año, en la esquina de Hernán Olguín con René Olivares, Concha amenazó y agredió sin mediar provocación a Víctor Freire, quien resultó con lesiones leves.
Posteriormente, ahí mismo en Hernan Olguín, el sujeto, en compañía de su madre y hermano menor, discutió violentamente con su vecina Jacqueline Obreque y parientes de esta, lanzando Concha un cenicero que quebró un vidrio de la propiedad vecina.
“Acto seguido, Javier Concha junto a su madre y hermano ingresaron a su vivienda; en tanto, Jacqueline Obreque junto a otros vecinos empujaron y forzaron el portón de la reja e ingresaron al antejardín de esta propiedad. Momentos más tarde, salió desde el cobertizo de su casa Javier Concha, portando un arma blanca de grandes dimensiones con la que caminó hacia Jacqueline Obreque, y le asestó un golpe, cercenándole la mano izquierda”.
Libertad vigilada intensiva
La libertad vigilada intensiva es una forma de cumplir condena sin estar recluido, sujeto al cumplimiento de un programa de actividades y la orientación de Gendarmería.
Pueden acceder personas que han sido condenadas a penas de cárcel entre 3 y 5 años.
La Batalla, de Maipú hacia el Mundo.
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