Las personas que trabajan en el proyecto Ecobarrio, de la población Cuatro Álamos de Maipú, homenajearon a Violeta Parra, “después de vivir un siglo”, el miércoles 4 de octubre, plantando un peumo en el arboretum (o jardín botánico).
Ceremonia a la que asistieron Betthy Fishman y Miguel Lawner, dos de las personas que tuvieron a cargo el diseño de la población en el gobierno del presidente Allende.
Allende estableció como prioridad absoluta para el primer año de su mandato el darle una solución habitacional a una parte importante de la población que no estaba en condiciones económicas de cumplir con las normas imperantes, por ejemplo aquella que exigía reunir una cantidad de cuotas CORVI.
Miguel Lawner, arquitecto, director ejecutivo de la Corporación de Mejoramiento Urbano (CORMU), organismo dependiente del Ministerio de la Vivienda durante la Unidad Popular, se mostró “conmovido” al ver la buena utilización que se les está dando a los espacios comunes, como el mismo arboretum en el que se le hizo el homenaje a Violeta.
“Cuando hicimos este conjunto habitacional —recordó— hubo una primera etapa que no fue fácil, porque los pobladores, en ese tiempo, muchos de ellos primera generación de migrantes del campo a la ciudad, no comprendían que pudiese vivirse en altura. Nosotros tuvimos que convencerlos con argumentos de la necesidad de densificar la ciudad con el objeto de evitar que se extendiera indefinidamente, y que se podía construir en altura con algunas de las condiciones que se tienen en las viviendas en extensión”.
“Fue una apuesta muy afortunada y muy necesaria para la ciudad, un ejemplo que ojalá hoy día se pudiera imitar, porque por desgracia en las políticas de vivienda hoy impera el lucro. El Estado ha cedido la iniciativa al sector privado, que naturalmente no vela por el bien común sino que vela por su bolsillo, y no hay manera de que se pueda construir un lugar donde el suelo y los espacios públicos tengan la generosidad que tienen estos”.
Para Betty Fishman, arquitecta, funcionaria de la CORMU, que junto a otros tres colegas fue la autora del proyecto:
“Lo más importante de este conjunto, creo yo, es que las áreas mínimas no son muy mínimas, son muy habitables comparadas con lo que se hace actualmente, y que tiene este conglomerado de áreas externas, que permiten la convivencia de la gente, que permiten áreas verdes, juegos de niños, y otras instalaciones que nutren el conjunto”.
El conjunto habitacional, diseñado según los principios de la Unidad Vecinal propuestos por el movimiento moderno de la arquitectura, fue uno de los muchos que se construyeron en ese entonces.
Como la mayor parte de estos, se pre-asignó a los comités sin casa o campamentos instalados en la comuna de Maipú.
Originalmente contemplaba numerosos espacios comunes: parvulario, comercio-artesanías, centro social, escuela, cancha deportiva y parque central.
La CORMU no alcanzó a construir todo el equipamiento proyectado (no la dejaron, mejor dicho…), pero reservó los espacios, que en definitiva acogieron otras instancias comunes, como el arboretum.
Exdirector del Diario La Batalla de Maipú.
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POR DIOS, QUE HERMOSO PROYECTO Y QUE ORGULLO DE SER AMIGA DE BETTY, UNA DE SUS AUTORES. FELICITACIONES A TODOS LOS IMPLICADOS.