La semana pasada, la Contraloría General de la República indicó que la Municipalidad de Maipú debía cumplir estrictamente lo dispuesto en la ley y evitar que sus acciones pudieran afectar el correcto empleo de sus recursos.
Esto, a raíz de las materias planteadas por el diputado de RD Pablo Vidal, el concejal independiente Pedro Delgadillo y un denunciante, que analizó en forma conjunta.
En primer lugar se refirió a la Cuenta Pública Gestión 2017 y su extracto, aquel librillo tan bullado el año pasado por contener más de cien fotografías de la alcaldesa.
Con respecto a este, la Contraloría advirtió un uso reiterado del nombre e imagen de aquella, en contravención con la jurisprudencia administrativa.
Pero además que no contiene la totalidad de las menciones a que alude la ley, “por lo que no se ajusta a los requerimientos exigidos para constituir un extracto de la cuenta pública”. Asimismo señaló omisiones en la cuenta pública misma, “por lo que, en lo sucesivo, dicha entidad edilicia deberá ajustar su accionar en forma estricta a lo previsto” en la normativa respectiva.
En segundo lugar se refirió a la difusión de la imagen de Barriga a través de diversos medios, advirtiendo que en algunos casos no resulta ajustado a la jurisprudencia.
Así en los más mediáticos, señalando que la Municipalidad “ha efectuado un uso injustificado de la imagen de la Alcaldesa a través de las gigantografías posicionadas en la oficina del programa “Fuerza de Mujer” y en la Clínica Veterinaria Municipal, en circunstancias que es la municipalidad como institución la que presta los respectivos servicios en cumplimiento de sus funciones y no una autoridad específica de aquellas que conforman el municipio”.
Esto, en concordancia con lo dicho el año pasado, por estas mismas fechas, con relación “a la inserción de manera reiterada de imágenes representativas de la alcaldesa o caricaturas alusivas a esta, en los elementos publicitarios y de difusión de las respectivas actividades que el municipio realiza”.
Al igual que en aquella oportunidad, esta vez señaló que la entidad edilicia “deberá; en lo sucesivo, abstenerse de actuar de la forma señalada”.
En este sentido, el diputado Pablo Vidal declaró:
“Primero, yo solo suscribí uno de esos requerimientos, que es por el uso excesivo de la imagen. Al respecto, me parece que la Contraloría debería actuar con más contundencia y sancionar el mal uso de recursos públicos, porque señalar que “esto no se debe volver a hacer” ha sido una sentencia desacatada en varias ocasiones por parte de la alcaldesa”.
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