Jorge Moreno quiere potenciar la cultura en Maipú: Si un niño tiene un violín difícilmente tendrá un arma

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Jorge Moreno es un candidato a concejal de Maipú que quiere trabajar por la cultura en la comuna. Medellín, ejemplifica, era una de las ciudades más violentas de Colombia y solo por la voluntad de un alcalde que elevó el presupuesto en cultura y arte hoy día es una ciudad modelo.

Jorge Moreno es un maipucino que recuerda su infancia y primeros años de existencia en la comuna hasta su bautizo en la Parroquia La Victoria y el desarrollo de toda una vida hasta pasada la década de los ochenta, en que se alejó por motivos de seguridad.

Forjó, siempre con su tierra en los pensamientos, un camino profesional, un camino de trabajo en el servicio público tras haberse formado como licenciado en estética e historia con una maestría en la Universidad Católica de Chile, desde siempre ligado a la cultura como asesor del Consejo y luego como agregado cultural de Chile en Perú entre los años 2014 y 2019, ejerciendo además la docencia universitaria.

Ahora es candidato a concejal: “Un concejal que va a trabajar por la cultura, por una comuna más potente, más humana”.

Agradecido de la comuna que le vio nacer dice querer “devolver la mano a su comuna”, por haberle facilitado el derecho a la educación, a la cultura.

Su candidatura ha recibido un apoyo importante de personalidades ligadas al mundo de la cultura y el arte en el país tales como las actrices Antonia Zegers, Paloma Moreno y Amparo Noguera y los actores Paulo Brunetti, Alfredo Castro y Óscar Hernández.

Algunos estudiosos e investigadores dicen que la cultura no hay que descubrirla, que está siempre, que es un patrimonio: ¿Cuál sería para usted esta cultura asentada en Maipú, que está latente?

“Es cierto, la cultura siempre está, nosotros nacemos en el contexto de una cultura y lo que hay entonces que potenciar dentro de la cultura es todo lo que tiene que ver con el desarrollo del arte, y ahí creo hay talentos inagotables en Maipú y se le tiene que dar espacios, también creo que es una forma de abrir puertas al desarrollo, la formación en las artes. También es una forma de mitigar lo que tiene que ver con la violencia, creo que cuando se abren puertas posibles sobre todo desde la cultura y las artes vamos a tener mejores ciudadanos, más felices”.

Desde ese punto de vista y viendo la realidad actual de Maipú, ¿cuál cree son las fortalezas, los ámbitos culturales que se han desarrollado bien y aquellos que están débiles?

“Creo que hay que respetar positivamente lo que es la Escuela Superior de Artes de Maipú y fortalecerla, descentralizarla, con mayor presupuesto, más académicos y que tenga una salida en la circulación de la producción de esa escuela, porque hay un gran potencial y creo además que hay que trabajar con todo lo que significan las universidades en Maipú, para establecer becas de formación para los nuevos talentos. ¡Hay mucho por hacer en Maipú! (…), creo que hay falta de gestión, hay mucho por hacer y hay herramientas para fortalecer todo lo que tiene que ver con la cultura, el patrimonio y las artes”.

“Siempre se mira como el hermano menor a los temas culturales o del arte, pero creo que hay una profunda equivocación”, dice: “Quisiera comentar muy resumidamente que Medellín era una de las ciudades más violentas de Colombia y solo por la voluntad de un alcalde, Jorge Fajardo, que elevó el presupuesto para cultura, arte, a un 6%, y pensaron que estaba loco, hoy día Medellín es una ciudad modelo en cómo la cultura y las artes son capaces de transformar una ciudad”.

¿Usted piensa entonces que es posible en Maipú bajar algunos indicadores de violencia incrementando la inversión en cultura?

“Por supuesto, como digo Medellín es un ejemplo a seguir y para mí sería un sueño poder establecer un convenio de cooperación con la Fundación de Orquestas Juveniles e instalarla en el sector poniente de Maipú, porque creo profundamente que cuando un niño tiene entre sus manos un violín, un instrumento, difícilmente va a pasar un arma por ahí”.