
Por Hernán Calderón R. Pdte. Conadecus
ENEL fue responsable de los cortes de electricidad de agosto de 2024 que afectaron a sus clientes de la Región Metropolitana, los más extensos y perjudiciales de que se tenga registro. Así lo declaró la propia autoridad, imponiéndoles una multa histórica de más 18 mil millones de pesos.
800 mil familias (más de 3,2 millones de personas) vieron gravemente impedidas o trastocadas su vida laboral, educacional y familiar, por días y hasta semanas. Pérdidas de alimentos y de enceres, angustias por no poder iluminar la casa y los artefactos esenciales para cocina, higiene y calefacción en invierno. Incluso, lo más grave, electrodependientes que murieron. Todo en el marco de una absoluta desidia de ENEL, que no se preparó en nada para un mal tiempo por todos anunciado, que no supo reponer a tiempo el servicio (por “ahorrar” en cuadrillas) y que brindó a la ciudadanía como respuesta a sus reclamos una “grabación telefónica”.
Es tan grave lo sucedido que el Gobierno, con gran despliegue por los medios, anunció las penas del infierno contra ENEL, incluso que caducaría su contrato para que otra empresa, de verdad profesional, asumiera su tarea.
Pero la pregunta más importante es la siguiente: ¿cómo el Gobierno obligó entonces a ENEL a compensar todos esos graves daños a los consumidores? Porque más allá de las multas que van en favor del Fisco y las amenazas de cierre, ¿quién se hace cargo de las enormes pérdidas de esas 800 mil familias?
Todas las altisonantes declaraciones y condenas del Presidente, del Ministro de Economía, del Ministro de Energía y del Director del Sernac hacían anticipar que las compensaciones en dinero a los consumidores serían históricas, obligando de verdad a ENEL a pagar por todos los perjuicios que provocó, y no dejando, como ha ocurrido tantas veces en Chile, “que le saliera gratis”.
¿Y eso ocurrió? Para nada, a ENEL le salió tan “gratis” que el mismo SERNAC, cuyo director se paseó por todos los canales para denunciarlo, terminó otorgándole un “perdonazo” (y a sus dueños italianos), ¡aceptando que se compensara a los consumidores incluso por debajo de los mínimos legales! Es de no creerlo, pero así fue.
¿Cómo sucedió esto? Simple, entre gallos y medianoche el SERNAC llegó a un acuerdo con ENEL en el llamado “procedimiento voluntario” (PVC), que él mismo dirige sin invitar a ninguna asociación de consumidores y menos a consumidores. Además, la ley prohíbe que se presenten demandas colectivas mientras se negocia ese acuerdo, por lo que todo se resolvió a puertas cerradas. Así, después de convocar a ENEL a sentarse a “conversar”, en tiempo récord de 6 meses anunció que llegó a un acuerdo “histórico”, dando por cerrado este caso.
Y efectivamente ese acuerdo será “histórico”, pero por otras razones: porque el SERNAC, obligado a proteger los derechos de los consumidores, simplemente los traicionó ante el poder de ENEL.
La ley del consumidor obligaba a ENEL a pagar 10 veces el valor del consumo eléctrico por cada día sin luz ( lo que dice el famoso artículo 25 A, Se entenderá por un día sin suministro cada vez que haya sido paralizado, suspendido o no prestado por 4 horas continuas o más dentro de 24 horas ). Es decir, si usted paga 30 mil en el mes, y estuvo más de 4 horas, es un día sin luz, ENEL debía pagarle 10 mil pesos, descontándolo de su cuenta. Ese es un “mínimo intransable”, y la ley prohíbe al SERNAC acordar una cifra menor. Y es un mínimo porque evidentemente eso ni siquiera considera compensar todos los alimentos perdidos, las pymes familiares que perdieron todos sus productos, las penurias de adultos mayores y niños, las molestias, la angustia y menos las vidas que costó este drama.
Repito, aunque parezca insólito, el mismo SERNAC decidió incumplir ese mínimo legal, dejando que ENEL terminara pagando cifras irrisorias que solo perjudican a los consumidores, pues ya no se las podrá cuestionar en tribunales.
Los datos están a la vista: 402.503 mil clientes -nada menos que la mitad de los perjudicados- recibirán por un día de corte $2.562 cuando legalmente tenían derecho al menos a $10.000; 136.838 que tuvieron 2 días de corte recibirán $18.000, que deberían recibir $20.000; 212.358 hogares que tuvieron cortes de 2 a 6 días recibirán $40.000 y deberían recibir al menos $60.000. Todo esto si usted paga cerca de 30 mil mensual de luz. Mientras más caro paga por la luz (y cada vez está más cara), más debería indemnizarlo ENEL.
Así, de los 800 mil clientes perjudicados por ENEL, prácticamente todos recibirán cifras que ni siquiera respetan los mínimos legales.
Quienes lean esto tal vez se preguntarán, ¿y cómo el SERNAC pudo dejar que se cometiera esta injusticia? Nadie sabe. Ni cómo llegó a esas cifras, ni cómo calculó el consumo de cada cliente, ni por qué motivo aceptó otorgarle este “perdonazo” a ENEL. Todo fue un acuerdo secreto entre cuatro paredes.
Lo que sí saben todos es que el SERNAC salió en la prensa, con bombos y platillos, a decir que este gran acuerdo con ENEL significaba que hasta tendría que pagar $377.000 a algunos clientes. Pero la “letra chica” era que ese pago sólo se efectuaría a 1.500 clientes y ¡fueron 800.000 los afectados!
La «Opinión Ciudadana» es responsabilidad exclusiva de quien la da, y no representa necesariamente el pensamiento del diario la Batalla. Escriba su «Opinión Ciudadana» a diario@labatalla.cl para que sea publicada sujeto a la línea editorial.

Hernán Calderón Ruiz, es Constructor Civil y actualmente Presidente de la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios (CONADECUS, 2020)
Deja una respuesta