Cada 4 de octubre se celebra el Día Mundial de los Animales, una jornada dedicada a crear conciencia sobre la importancia de proteger la fauna y los ecosistemas que estos seres habitan. En este contexto, es fundamental recordar la biodiversidad única que ofrece Chile, y en particular, las especies endémicas que habitan en la Quebrada de La Plata, un tesoro ecológico ubicado en la comuna de Maipú.
La Quebrada de La Plata es un santuario natural situado en Maipú que alberga diversas especies de flora y fauna, muchas de las cuales son endémicas, es decir, no se encuentran en ningún otro lugar del mundo. Este espacio natural es un remanso de vida en medio de una zona semiárida, con matorrales y quebradas que ofrecen refugio a especies que, debido a la expansión urbana, enfrentan cada vez más amenazas.
Entre las especies más destacadas se encuentra el degú (Octodon degus), un pequeño roedor que habita en galerías subterráneas y que ha adaptado su vida a los matorrales y terrenos semiáridos de esta región. Su comportamiento excavador lo convierte en un ingeniero del ecosistema, modificando el suelo y contribuyendo a la salud del hábitat.
Habita en galerías subterráneas que cava en zonas de matorrales, en campos de cultivos y terrenos semi-pantanosos.
Otro residente notable es el cururo (Spalacopus cyanus), un roedor también endémico de Chile que mide alrededor de 14 cm y que vive en madrigueras subterráneas. Su rol en el ecosistema es clave, pues ayuda en la aireación del suelo y en la dispersión de semillas.
Especie de roedor, es endémico de Chile. Mide alrededor de 14cms. de longitud y su cola 4cms.
El mundo reptil también tiene un representante excepcional en la iguana chilena (Callopistes maculatus), un lagarto de hasta 50 cm de largo, de color gris oliváceo y poderosas mandíbulas. Este carnívoro carroñero es un depredador importante en su ecosistema, controlando poblaciones de pequeños animales.
Especie de lagarto que llega a medir hasta 50cms. de largo. de cabeza piramidal con mandíbulas poderosas, color gris oliváceo. Es un reptil carnívoro y carroñero.
La avifauna de la Quebrada de La Plata también es rica en especies endémicas, como la turca (Pteroptochos megapodius), un ave esquiva que prefiere los cerros semiáridos y matorrales. De plumaje café ahumado, se alimenta rascando el suelo en busca de insectos y pequeños invertebrados.
Otra ave destacada es la tenca (Mimus thenca), que habita en matorrales y campos abiertos. Su canto melodioso y su dieta variada, que incluye insectos, frutos y néctar, la convierten en un ícono de los paisajes centrales chilenos.
Habita en bosques semiabiertos, campos, laderas y matorrales. De tonos pardos, más claros en la garganta, pecho y abdomen, mide entre 28 y 29cms. Es omnívora, se alimenta de insectos, lombrices, arácnidos, semillas, frutos y néctar de las plantas. Oír canto:
Finalmente, no podemos olvidar a la perdiz chilena (Nothoprocta perdicaria), una especie que, a pesar de su tamaño (alrededor de 30 cm), es conocida por su capacidad de camuflaje en los matorrales y su dieta a base de insectos y semillas.
No solo en la Quebrada de La Plata se puede observar una rica biodiversidad; Maipú urbano también es hogar de numerosas especies de aves que han logrado adaptarse al entorno urbano. Entre ellas destaca el zorzal, que se alimenta de lombrices y pequeños insectos en áreas verdes y parques, y la tórtola, un ave veloz y desconfiada que se ha vuelto parte del paisaje cotidiano de la ciudad.
Otras aves, como la cotorra argentina, aunque no son nativas, han encontrado en los árboles y jardines de Maipú un lugar propicio para anidar, aunque su presencia ha generado debates sobre el impacto en la fauna local.
Ave rapaz en peligro de extinción que pueden llegar a pesar hasta 15 kilos y la envergadura de sus alas pueden medir hasta 3 metros, ha sido avistada en el área de Rinconada. Oír canto:
El Día Mundial de los Animales nos ofrece una oportunidad para reflexionar sobre la relación entre el ser humano y la naturaleza. La fauna endémica de Maipú y de la Quebrada de La Plata es un ejemplo de cómo los ecosistemas locales son frágiles y valiosos a la vez. La expansión urbana y las actividades humanas representan un reto para la conservación de estas especies únicas.
Es vital seguir protegiendo áreas como la Quebrada de La Plata, no solo por su biodiversidad, sino también por el papel que juegan estos espacios en la salud ambiental de la región. La fauna endémica es una parte irremplazable del patrimonio natural de Chile, y su conservación es responsabilidad de todos.
En este Día Mundial de los Animales, es esencial visibilizar la riqueza biológica que tenemos en nuestras propias comunidades. Maipú, con su Quebrada de La Plata y sus espacios verdes urbanos, es un ejemplo de cómo la fauna silvestre aún puede prosperar en medio de la urbanización, siempre que se tomen medidas adecuadas para su protección. Al cuidar estos hábitats y respetar a las especies que los habitan, garantizamos un futuro donde la biodiversidad siga siendo parte esencial de nuestro entorno.
Conoce más fauna y biodiversidad de Maipú en la Enciclopedia del diario La Batalla.
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