Concejal de Maipú Mauricio Ovalle (PDC) entregó su balance del 2015

El concejal de Maipú Mauricio Ovalle (PDC) entregó a La Batalla su balance del año que se va.

Una visión crítica que sin más preámbulo presentamos a continuación:

Un año complejo este 2015 que ya se nos va, no es motivador tener a la primera autoridad comunal en calidad de imputado en un caso tan mediático y de tan largo aliento.

Lo bueno de este 2015 es que SMAPA logró revertir, a pesar de una pésima conducción, el magro resultado que nos traía con un 0% en el cumplimiento del Plan de Desarrollo de nuestra sanitaria, poniendo en serio peligro su concesión. La falta de prolijidad en procesos que son responsabilidad exclusiva de la administración nos puso en aprietos reales ante la autoridad fiscalizadora, ello a pesar de las incansables advertencias de funcionarios y otros actores conocedores de los distintos procesos que se deben observar al momento de tomar decisiones sobre obras y acciones de SMAPA.

Un punto importante y muy positivo ha sido el profesionalismo y dedicación de nuestros funcionarios municipales, de todos los estamentos y direcciones, en cuanto a mantener el funcionamiento del municipio en los momentos más críticos de este. Ellos pusieron la cara y el hombro frente a la comunidad y frente a sus pares de otros municipios para decir presente con su trabajo el que ha permitido al municipio de Maipú seguir funcionando.

Lo negativo que nos deja este 2015 es sin lugar a dudas la situación que hoy nos tiene con el alcalde en calidad de imputado y con medidas cautelares, por una parte y con una definición política que tiene en el aire a la Nueva Mayoría por otra. Desconocer que esta conjugación de situaciones ad portas de una nueva elección municipal nos tiene con un pie forzado, seria tapar el sol con un dedo.

La situación judicial que vive el alcalde y las aristas políticas que ello va generando, hace que perdamos el foco en situaciones que la comunidad resiente de manera objetiva en materia de seguridad, de falta de oportunidad y de igualdad ante un municipio que debiera atenderlos y recibirlos sin importar su condición o pensamiento.

Es de esperar que el próximo año pueda de verdad ser mejor para todos, especialmente para las maipucinas y maipucinos que solo quieren ver a su comuna creciendo de manera armónica, donde sus hijos y nietos sientan el mismo orgullo que sentían muchos al decir vivo en Maipú.