El básquetbol es pasión para multitudes y casi una forma de vida para un grupo de mujeres de la comuna. Ellas son las integrantes del Club Deportivo Maipú, una institución que fue fundada en diciembre de 2016, con el sueño de crecer como una entidad deportiva y social.
Por José Antonio Lizana.
Fotografías de Felipe Pino.
El básquetbol es pasión para multitudes y casi una forma de vida para un grupo de mujeres de la comuna, algo que no resulta fácil cuando se es trabajadora, madre, estudiante y además deportista de alto rendimiento. Ellas son las integrantes del Club Deportivo Maipú, una institución que fue fundada en diciembre de 2016 bajo el alero del club del Colegio Pedro Poveda, que participa en LIBAM.
Su presidente es Alex Soto, un ingeniero comercial y ex futbolista que integró como juvenil las filas de Colo-Colo, Universidad Católica y Palestino. “Mi señora es maipucina y fue una destacada seleccionada nacional de básquetbol (Rosana Carmona) y quien me introdujo en esta disciplina. El fútbol me entregó una cultura del deporte y mi profesión me dio los conocimientos para guiar organizativamente a este club hacia las metas deportivas que se ha propuesto”, afirma.
El Club Deportivo Maipú se constituye con diecisiete jugadoras de treinta años y más. Actualmente, participan los días sábados en LIBAM y los domingos en la Liga de Estación Central. Destacan en este equipo: Rosana Carmona, Elizabeth Gumera, Kassandra Espinoza, Viviana Hernández, Solange Valencia y Francia Flores entre otras.
La alero y ayuda base Rosana Carmona es una referente, por haber sido seleccionada nacional y haber jugado en equipos de la talla de Colo-Colo, Lever Chile, Usach y Brisas. “Este es un club que se diferencia del resto por su estructura, donde todos los roles están bien definidos. Se asemeja a los grandes clubes en los que tuve la oportunidad de participar en mis mejores años del básquetbol”, comenta la deportista.
La pivot bajo Elizabeth Gumera se refiere al nivel de los torneos en que participan. “Son campeonatos en donde la experiencia y juventud de buenas jugadoras se fusionan, entregando calidad en el juego y en los encuentros. Además, permite a las más pequeñas obtener experiencia para desempeñarse en sus clubes con mayor seguridad”, reflexiona.
Temuco
El team comunal es dirigido por la reconocida entrenadora Valeska Gallardo, quien ya le ha otorgado satisfacciones deportivas al CDM con la obtención del Torneo Nacional de Temuco en febrero de 2017. Este campeonato se consiguió de forma invicta ante los combinados de Viña del Mar, Osorno y el local Temuco, todo un envión para el próximo torneo nacional en Punta Arenas en octubre próximo, y para el Mundial en Brasil en junio de 2018.
La ala-pivot Kassandra Espinoza se integró al equipo posterior a la participación en el campeonato nacional de Temuco. “Soy de Concepción y me incorporé este año al Club Deportivo Maipú. Me han acogido muy bien y los dirigentes se toman las cosas con mucha seriedad: entrenamientos, viajes y otros ítems. Esto nos motiva a siempre dar lo mejor y por eso estoy segura de que estaremos en la pelea por el título”, declara.
Renacer
El CDM es una institución familiar, donde los hijos y las parejas de las jugadoras se reúnen, participan e interactúan en actividades sociales y paralelas al deporte. Rosana Carmona comparte su cotidianidad con la práctica deportiva. “El trabajo tiene su horario y el deporte y la familia son totalmente compatibles; tratamos de estar con ellos en todas. No podría prescindir del deporte en mi vida, es mi mejor medicina junto a mi familia”, relata la ex seleccionada chilena.
La alero Viviana Hernández también se refiere a lo anterior. “Uno nace para esto y muchas vamos a seguir jugando hasta que tengamos sesenta, setenta y ya no podamos más. Casi todas nuestras mamás jugaban; seguimos nosotras y nuestras hijas también lo hacen. A nuestros esposos también los hacemos participar, y en muchas ocasiones nos acompañan a las giras. El básquetbol es un renacer en nuestras vidas”, sostiene.
Entidad deportiva y social
En este club todo se hace por autogestión, y por eso sus dirigentes no se cansan de golpear las puertas de algunas de las empresas más representativas de la comuna para buscar apoyo. También se organizan actividades y fiestas para reunir recursos. En este club tienen un sueño y su presidente lo expresa de la siguiente forma: “Queremos crecer no sólo en el área del básquetbol. Nos gustaría ser reconocidos como una entidad deportiva y social, por nuestros talleres, clínicas y por otras ramas deportivas”.
La Batalla, de Maipú hacia el Mundo.
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