Por Álvaro Méndez.
Integrante de “Campanario”, una de las agrupaciones más clásicas e interesantes de la escena local y de “Manos Rojas”, su proyecto más personal, Carlos nos cuenta sobre el modo en que llegaron la música y el charango a su vida, sobre sus bandas, sus sueños, su profundo arraigo e identificación con la comuna, sobre cómo se gestó esta notable charla y todas las oportunidades que hoy proyecta…
¿Cuándo y cómo nace tu relación con la música en general y el charango en particular?
Cuando salí de 4to medio y tenía como 18 ó 19 años de edad, recuerdo invitar a salir a mi abuela paterna -llamada Rosa- para que compartiéramos una bella tarde juntos… Sin titubear ella pidió que fuéramos al Bellavista a pasear y comer algo… nunca olvidaré que estando ahí pude notar entre la multitud a un guitarrista solitario (“instalándose”) en un improvisado escenario, muy preocupado porque sus instrumentos sonaran correctamente, pese a ser muy humilde tanto la guitarra como el amplificador. Al cabo de un rato ese músico logró que sus instrumentos finalmente sonaran y junto con el movimiento de sus dedos fui cautivado por los primeros acordes de: “El Arado” de Víctor Jara. Apenas comenzó se me lleno de mariposas el alma entera…. Algo dentro de mí sintió una conexión muy profunda con esos sonidos, que desconocía por completo hasta ese momento. Luego de eso mi abuelita decidió que fuéramos a la feria artesanal del Santa Lucía en donde, mientras ella miraba unas revistas antiguas y yo disfrutaba el verla feliz haciendo eso, entre tanto sonido ambiente de pronto escuché algo que nunca antes había oído: El sonido de las cuerdas al aire de un charango – que sería Sol-Do-Mi-La-Mi -y no lo dudé, miré a mi abuela y le dije permiso… fui directamente en busca del sonido aquel, quería saber con exactitud qué sonaba así, porque cada molécula de mi ser se estremeció ante su sonoridad. Caminé entre los pasillos de la feria artesanal hasta que lo tuve por primera vez en frente y supe que el nombre de ese instrumento era “Charango”. Definitivamente un momento muy crucial en mi vida, fue como “amor primera oída”. De ahí en adelante que nunca más deje de sentir ese amor por la música….
¿Desde tu trabajo y música, qué mensaje te interesa rescatar o exponer?
Desde un principio la búsqueda se ha enfocado en traducir el lenguaje que viene incrustado directamente desde el alma. Usando la música y más específicamente el charango para tales efectos… siempre con la inquietud creativa, con el alma fluyendo a través de los hombros, pasando por el antebrazo, bajando hacia las manos y explotando por las yemas de los dedos…. comunicar, entregar… poner el alma en cada nota. Cierto día llegue a la conclusión de que la música está en el aire, rebotando por todos los rincones del universo. Cuando las personas sienten amor o cualquier sentimiento fuerte en esta ruleta rusa de emociones que es la vida misma… en su ser sus vibraciones alcanzan frecuencias altas, que se encuentran en el aire, se suman todas y se hacen más intensas juntas…. Entonces están los músicos, que no son otra cosa que otro instrumento más para “canalizar” esta música que se encuentra ahí revoloteando y vibrando por todas partes. Entonces la idea central es rescatar esa forma de componer, “canalizando” sonidos ancestrales para revivir vibraciones en el alma de quien escucha. Es en el transcurso del experimentar el viaje musical que se pueda producir durante la canalización en donde me encuentro en este momento… Viviendo la experiencia de sentir profundamente, con los ojos cerrados cada nota, cada acorde…. En donde sea que se entregue el resultado de este hermoso proceso, se entrega con todo. Ya sea en la micro, el metro, una peña, un escenario, etc.
“Canali-Hacer” un disco para charango, viene siendo una meta muy importante en este proceso creativo y es hacia allá hacia donde apuntan todas las flechas.
Cuéntanos sobre tu charla, ¿cómo nace esta instancia?
Hace un par de meses atrás comencé a administrar una página de venta virtual de charangos llamada “Charangolandia”, la cual es la vitrina en la internet de los instrumentos traídos a Chile por el representante oficial de la marca Quispe Torrez en Chile, Don Leonardo Larenas Cruz… en esa página se contactan muchas personas que quieren comprarse un charango o simplemente aprender un poco acerca de este bello instrumento. Uno de ellos quedó muy fascinado al conversar conmigo acerca del charango, sus características y también un poco de su historia…..al tiempo me contó que era parte de la directiva de la Asociación Nacional de Folcloristas de Chile y que luego de estudiar mi perfil y ver que ando por todas partes dejando el alma en cada nota con mi charango, me propuso realizar esta charla en la Biblioteca Nacional dentro del marco y ciclo de Charlas: “Música Instrumentos y Cultura Tradicional” organizado por ANFOLCHI y Auspiciado por la Biblioteca Nacional y la Sala del Archivo de Música Nacional. Como era de esperarse dije sin dudarlo un solo segundo: “Si, claro que puedo!”. Denominamos a la charla: “El Charango y su espíritu Creativo en Chile” en conjunto con mi hijo de 6 años Salvador… ya que él también ha sido parte de los procesos creativos tanto como observador como fuente de inspiración. Dividí entonces la charla en dos partes; la primera compuesta por una exposición teórica y la segunda junto al gran músico charanguista y compositor Alvaro Martínez Ruz (uno de mis compañeros en el proyecto Manos Rojas) con quien comenzamos a contar una pequeña historia de cómo se fueron escuchando en nuestro país distintos temas originales para charango y de ahí en adelante fue tocar y tocar, tema tras tema….
Llenamos de música la sala del Archivo Musical de la Biblioteca Nacional y a la vez dimos un pequeño recorrido por los principales compositores chilenos para este bello instrumento… finalmente terminamos tocando nuestro trabajo, que viene a ser el reflejo de toda esta herencia musical tremenda, acumulada desde la década del 60 aproximadamente. Con Alvaro presentamos en esta ocasión dos temas compuestos y arreglados por nosotros como “Manos Rojas”: “Citandino” y “El Llanto del Indio”, fue un éxito, tanto así que todos los asistentes se dieron un ratito para conversar y compartir, definitivamente una gran experiencia y un orgullo para el charango llegar a exponer en un lugar tan maravilloso como ese.
¿Esperas repetir la experiencia de tu charla en algún otro lugar?
La charla es una modalidad de representación artística muy completa ya que a través de ella se enseña de manera rápida y concreta la historia del charango, sus orígenes, formas de fabricación, partes del Instrumento, cómo tomarlo, afinación, etc. Apoyado por una presentación en diapositivas y bastante material audiovisual interesante, se abarcan todos esos tópicos… Inclusive contamos con el apoyo permanente de Don Leonardo Larenas Cruz, quien a través de Charangolandia nos proporciona modelos exclusivos de distintos tipos de charangos, hasta llegar a la parte que tiene que ver con el espíritu creativo en Chile relativo a este bello instrumento y ahí nos damos un recorrido musical por los principales exponentes de nuestro país, interpretando en vivo los temas.
En lo personal para nosotros como Manos Rojas sería ideal que surgiera la posibilidad de seguir presentando nuestro trabajo, si el objetivo del arte es ser entregado! y acá en Maipú sería aún mejor. En este caso incorporamos el factor histórico-anecdótico, volviéndolo mucho más interesante, divertido e interactivo para aprender, entre más se enseñe y comparta la información, mucho mejor… quien sabe si logramos tocar el corazoncito de un niño o niña que el día de mañana decida hacer música…. Por lo pronto, participaré en el “Curso de Perfeccionamiento en Composición e Interpretación Contemporánea” Copiu 2015, el cual se realizará en agosto en la Facultad de Música UMCE y en el Centro Cultural Espacio Elefante perteneciente a la Facultad de Artes de la Universidad de Chile. El Curso culmina con la presentación en conciertos, durante la primera mitad del mes de diciembre de 2015 en el GAM y sala SCD, en el marco de PRISMAS, Festival Permanente de Creación Latinoamericana. Se realizará una grabación de los conciertos y estoy seguro de que será maravilloso, ahí estaremos con todo el corazón.
Tienes una conexión profunda con Maipú, ¿qué puedes contarnos de esa relación?
Si, desde toda la vida me he sentido profundamente conectado con Maipú… con sus calles, con sus plazas, el templo, el cerro 15, la historia misma que guarda la comuna! Todos y cada uno de los detalles que por acá residen, por lo menos para mí, es un valor agregado fundamental a la hora de buscar inspiración creativa… de hecho esa es la base de la inspiración creativa que intento aplicar con mis grandes amigos del grupo Campanario. Tiene que ver con cerrar los ojos por unos instantes y situarte en la tierra que te toca caminar… como por aquí mismo hace casi 200 años pasaron acontecimientos tan importantes dentro de la historia de Chile, cuanta gente! cuanta batalla! cuanta energía!… Definitivamente ahí en esa energía plasmada en el viento se puede esconder mucha, mucha música. En Maipú he podido conocer el amor, tener una familia hermosa, un hijo maravilloso y todo el amor y paciencia de su madre Carolina Jara Díaz, quien pese a toda adversidad siempre ha estado ahí en los momentos más difíciles y también en los más maravillosos, mis padres, mis hermanitas, mi hermano, sobrinxs, tías y tíos, etc. Mucha gente maravillosa siempre está girando alrededor nuestro, es inevitable y vital mencionar a personajes como Jaime Barrueto con quien tuve la oportunidad de compartir escenario y estar ahí “vivos” en todos los eventos de antaño, Samuel Vilu que ahora está en Europa, Elías Vega, un excelente charanguista y músico, Alfredo Riveros Silva, gran baterista y músico, Jorge Chartier y Jonathan Olave… Poco a poco quisiera comenzar a darle más sentido aún a esta relación tan estrecha entre la comuna, la música, el arte y el amor, en lo profundo siento que así será.
Actualmente, en lo estrictamente musical, eres parte de 2 importantes proyectos; “Campanario” y “Manos Rojas”, qué nos cuentas de cada uno y como te proyectas en cada banda?
Así es, con los muchachos de Campanario hemos estado trabajando duro en la música, ensayo tras ensayo, siempre concentrados en pro de la creación y el crecer como un grupo de amigos que aman la música. Todos vemos este trabajo como profesionales, dando cada uno lo mejor de sí… tanto en la sala de ensayo como en cualquier escenario donde nos toque presentarnos. En Campanario estoy rodeado de grandes maestros como es el caso de Patricio Jáuregui, gran pianista y compositor (quien deleita al oyente jugando con sus dedos sobre el piano que sea… además el siempre está realizando labores de director de la banda), Francisco Provoste, quien tiene una musicalidad infinita y una tremenda fuerza al cantar. También Heraldo Barahona, un bajista sensacional, full creatividad y muy profesional a la hora de presentarse y tocar… También ahora está con nosotros Alexis Vargas… un excelente Baterista, que pese a llevar poquito tiempo de unirse al grupo, ha demostrado toda su seguridad y profesionalismo como músico nuestro productor Mauricio Muñoz Núñez es vital en todo este proceso también… cada uno de ellos se vuelve primordial a la hora de resumir el gran avance que ha tenido el grupo hasta el día de hoy, de hecho ya estamos trabajando fuerte con miras a nuestro disco.
En Manos Rojas tengo el gran honor de compartir siempre en la senda de la creación y el desarrollo de la musicalidad con un gran charanguista, compositor e intérprete, mi gran amigo y compañero Álvaro Martínez Ruz quien con su charango y guitarra es un aporte constante al crecimiento de ese espíritu creativo del cual se habla en la charla…. y constantemente a decir verdad. También a Manos Rojas se ha sumado hace un par de meses, un joven muy entusiasta que ha demostrado toda su fuerza y amor por el arte y con quien también recorro las calles de nuestra comuna entregando nuestra música Chilena para charango y guitarra… es Luis Sandoval Farías un amigo y compañero que promete mucho en este mundo de esfuerzo, perseverancia y musicalidad. Quiero mencionar a una amiga que estaría con nosotros por las calles de nuestra comuna – si no se hubiese quebrado el tobillo al caer de la micro – ella es Tamara que con su cajón peruano añadía todo el ritmo a la entrega musical… Esperamos se recupere pronto! Entonces Alvaro, Luis y este humilde servidor somos Manos Rojas y recorremos todos los escenarios posibles para poder entregar lo que amamos. También con Manos Rojas estamos con miras a realizar nuestro propio trabajo y así se ha visto reflejado presentando hace poco en la Biblioteca Nacional. La charla: “El Charango y su espíritu Creativo en Chile” tendrá el gran honor de ser compartida nuevamente, el 20 de agosto en este gran evento de música y composición contemporánea, que además ya ha recorrido varios países de Latinoamérica y el Mundo; Copiu 2015, allí seguiremos llevando adelante a nuestra música y a Manos Rojas…
Tocar, con todo!
Poniendo el alma en cada nota!
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