Bernardo de la Maza, candidato a constituyente: Que no haya motivos para un nuevo estallido social

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Bernardo de la Maza es de aquellos candidatos a la convención constituyente que goza de un especial privilegio en el alto conocimiento ciudadano, tras su trayectoria como periodista en cuatro décadas de televisión en Chile. En noticieros, como comentarista internacional, o como un periodista destacado que cubrió con especial distinción hechos de nivel mundial, como la Guerra de las Malvinas y la caída del Muro de Berlín.

Su trayectoria periodística, ligada por tantos años a los más importantes medios de comunicación, le han convertido en un personaje reconocido por la ciudadanía, que recuerda su imagen y le hace sentir su recuerdo y aprecio mientras recorre las comunas del Distrito 8, en este desafío distinto que, declara, lo motiva su preocupación por “el país que le vamos a dejar a nuestros descendientes.”

Bernardo, ¿usted es independiente, representa a algún partido?. ¿Qué podría decir o destacar a nuestros lectores sobre su postulación a constituyente por el Distrito 8? 

“Quisiera más destacar que voy en una lista del partido Evópoli, pero soy absolutamente independiente.”

“El partido me invitó a participar. Yo le dije que era independiente y me dijeron bueno, precisamente sabemos que era independiente. Sabemos que tienes tus ideas propias y te las respetamos y te las vamos a respetar. Jamás vamos a intervenir en tu pensamiento ni te vamos a pedir que digas nada, absolutamente nada que no sea lo que tú quieras decir. Y si no fuera así, a mí me daría lo mismo, yo voy a decir siempre lo que yo quiera.”

La imagen que uno asocia a Bernardo de la Maza es de una labor en el periodismo. Por cierto, en la televisión, un hombre conocido. ¿Cuáles son las diferencias que hay entre ese mundo que ha vivido en la televisión y esta postulación a una actividad tan importante, como la elaboración de la nueva Constitución Política? 

“Yo creo que es muy distinto. Yo como periodista, durante toda mi vida informé, opiné e informé. Y ahora estoy en la calle buscando apoyo, defendiendo lo que es, no me gusta decirlo, es una causa política, después de todo, pero buena política. Yo desprecio, como la mayoría de los chilenos, por no decir todos, la mala política que creo es la gran culpable en gran medida de lo que estamos viviendo. Espero que una inmensa mayoría de chilenos, vaya a votar, vote en conciencia y vote bien. ¿Qué significa para ir a votar bien?  votar por gente capaz, consecuente, equilibrada, que no nos lleve a los extremos.”

“Yo creo que con una buena Constitución nos puede dar muchas luces y dar esperanza de que efectivamente vamos a ir por buen camino.”

Bernardo en ese sentido, respecto de sus anhelos; ¿Cómo ha sentido que es la recepción de la gente, ha podido visitar las comunas del Distrito 8?

“Yo percibo desde luego un gran aprecio hacia mi persona, por mi carrera periodística, lo cual lo agradezco inmensamente y veo que casi en todas partes las demandas son casi las mismas, que termine sobre todo la delincuencia.”

“Creo que la delincuencia es un gran tema hoy en día en todas las comunas, no es posible que las personas común y corriente estemos enrejados, asustados en nuestras casas, con nuestros niños, sin saber si les va a caer una bala loca por ahí y los delincuentes anden libres.”

“Muchos también están molestos por las peleas, por las platas poco claras, que también es problema en todas las comunas. La gente dice, ¿qué está pasando con las platas municipales? Un tema fundamental mío es luchar contra la corrupción, la corrupción que se da en los negocios chicos, en las municipalidades y en las grandes empresas, no más a empresarios corruptos que mañana tengan como castigo una clase de ética. Me parece indignante y el país está hastiado y molesto y no soporta más esto.” 

Ciento cincuenta elegidos van a representar al pueblo soberano en una materia de la más alta responsabilidad, ética y política. Ahora, respecto de eso, ha habido recientemente una elección donde el 80 por ciento de la población ha aprobado una nueva Constitución. Eso a veces se entiende como sinónimo de un cambio radical de todo. ¿Cómo cree que se enfrentará este debate?

“Mira, yo creo que la inmensa mayoría de la gente quiere una nueva Constitución, pero no sabemos cuál es esa Constitución que quiere la gente. ¿Exactamente cuál? ¿Qué quisiera yo?, que la gente eligiera bien y eligiera a una mayoría muy sólida.”

“Ojalá un 70 u 80 por ciento de los electos de los constituyentes electos sea gente que esté dispuesta a conversar civilizadamente, y a no convertir esta convención en lo que el Congreso Nacional hoy día, que es una zona de disputas, de descalificaciones, de personalismos. Tenemos que tener gente de mucha calidad, que no vaya a actuar, que no vaya a  ganar tribuna, a decir leseras, no hay tiempo, no nos  podemos farrear esta oportunidad, es única, fundamental, necesariamente tiene que salir una buena Constitución. O si no, que es mi punto más claro de esto, si no hacemos una buena Constitución, lo que va a ocurrir aquí es que vamos a tener un segundo estallido social que va a ser mucho peor que el primero.”

¿Usted había visualizado con su experiencia, que iba a llegar un momento en que estaría en esta campaña?

“Jamás, nunca, nunca en mi vida pensé que iba a estar en un acto político. Y como candidato político me han ofrecido ser senador, diputado, vocero de gobiernos, de distintos gobiernos, lo más variado, embajador de Chile, nunca, nunca quise aceptar. Yo vivo de mi profesión del periodismo. Después vivía escribiendo mis memorias, haciendo las clases, leyendo mucho y viendo a mis nietos, mi familia, que la amo. Y precisamente porque estoy preocupado por mi familia, que decidí dejar todo eso y salir a la calle y volver a hacer periodismo entrecomillas, a estar con la gente, escucharla, porque me preocupa mucho el país que le vamos a dejar a nuestros descendientes.”

Bernardo, la pregunta que uno se hace es: ¿Cómo le ha cambiado la vida a usted, acostumbrado a producir la información?

“Sí, entregando información y hoy día en campaña. Eso es radicalmente distinto, me suena súper raro, me suena extraño, no es lo mío, pero creo que vale la pena. Estoy feliz de estar con la gente, estoy fascinado porque me ha gustado mucho recorrer un Chile, que no es el mismo que dejé cuando yo era periodista hace apenas qué se yo, ocho o diez años atrás. Este otro Chile cambió, nuestro país cambió”

¿Y por qué cree usted que cambió tanto?

“Bueno, yo creo que influyen factores como la llegada de inmigrantes, no estoy discriminando a los inmigrantes, me encanta que llegue gente al país, pero que llegue buena gente. Y creo que estamos viviendo en un momento complicadísimo, económico, y recibir muchos inmigrantes es complicado porque se está afectando a gente que está sin trabajo. Entonces hay un inmigrante que acepta un trabajo por cien mil pesos y deja de lado a un chileno que quisiera esa plata.”

Ahí puede surgir un debate interesante en la convención, porque hay quienes dicen que las fronteras son imaginarias, que debería ser un espacio abierto, libre de tránsito, pero hay otros que también se oponen y piden mayor control.

“Creo que no es bueno para el país, reiterando que no soy absoluto xenófobo, que me encanta la inmigración, creo que le hace muy bien al país, pero estamos viendo un momento super especial en este momento, estamos creciendo prácticamente nada, el nivel de vida de la gente se ha ido deteriorando fuertemente durante muchos años, necesitamos que esta nueva Constitución siente las bases para que el país crezca de nuevo”