En la última reunión de los profesores de Maipú, que se efectuó en la sede de la CUT de la avenida 5 de abril, el secretario del colegio de la orden a nivel comunal, Arturo Madariaga, cumplía un rol de moderador. Tras realizar un comentario en sintonía con la postura favorable al paro indefinido, sostuvo un intercambio verbal con la presidenta, Nadia Ávalos.
De pronto se hizo del micrófono, y ante la sorpresa de la concurrencia señaló que, cansado de los insultos de aquella, presentaba su renuncia.
La Batalla pudo conversar con él en un momento de mayor tranquilidad.
Arturo: ¿Renunció?
“Yo manifesté en la asamblea comunal que si Nadia [Ávalos] insiste en su postura, yo voy a renunciar al Colegio de Profesores. Porque me parece que está tratando de imponer una idea que ha sido pauteada por su partido y no está representando a los profesores de la comuna. Nosotros fuimos elegidos por los profesores de Maipú, no por el partido al cual pertenece ella”.
¿Hay una crisis en el directorio comunal?
“Yo creo que sí. Hay una presidencia que lleva seis meses y ha sido incapaz de responder a los acontecimientos que están ocurriendo en este minuto. Ella en vez de orientar a los profesores y darles las directrices ha sido confrontacional. Le ha ofrecido incluso pelea a algunos de los asambleístas en el día de ayer, diciéndoles: Ven, dímelo aquí delante mío, dímelo delante mío…, cuando le gritaron que ella tenía que ir a dar cuentas a su partido. Y yo creo que no, que los dirigentes tenemos que orientar a las bases. Yo le propuse que nos juntáramos aquí en la CUT y le diéramos a conocer a los profesores toda la información de que disponemos”.
¿Usted dice que la presidenta amenaza a los afiliados?
“La presidenta comunal es una persona normal, muy normal, hasta que se le lleva la contraria. Cuando a la presidenta se le dice algo que está en contra de lo que ella piensa se convierte en un energúmeno, se transforma. Entonces yo ante una persona así, que pierde los cabales tan rápidamente, lo único que podría decir es que tendría que ir rápidamente a ver al psicólogo. Porque no puede estar conduciendo a una institución tan prestigiosa como el Colegio de Profesores, ni menos estar haciendo clases. Pobres niños esos, qué enseñanzas están recibiendo, y de qué persona”.
A ella, siente usted, ¿le incomoda la situación del paro?
“A ella le incomoda, lógicamente, porque ella lo dijo ayer, cuando un profesor gritó que tenía que renunciar Jaime Gajardo, porque era vendido, y ella dijo: Ven a decírmelo aquí delante mío, él fue mi pareja durante años, tengo dos hijos con él y lo conozco más que nadie, nunca ha sido un vendido… Entonces esas no son respuestas que deba dar una dirigenta a un miembro de la asamblea”.
“Yo creo que ella, insisto, está respondiendo a los dictámenes de su partido político, que es el partido comunista”.
“Ella no está luchando por los profesores, está luchando por una ideología y trata de defender la cabeza de Jaime Gajardo a toda costa de algo que lamentablemente fue un error”.
Usted va a seguir entonces participando de la directiva del colegio de profesores.
“Tengo que pensarlo. Si ella continúa con esas actitud lo tendré que analizar. Por ahora yo sigo siendo dirigente, los estatutos no establecen una renuncia, y lo que sí establecen es que si yo falto al menos a tres reuniones quedaría eliminado, así que esa es una de las posibilidades de salir del Colegio de Profesores o presentar mi renuncia derechamente en el regional metropolitano”.
“Estamos aquí para dar la cara y decir que nosotros fuimos electos por los profesores y hay que estar con ellos hasta el final”, finalizó el dirigente.
La Batalla, de Maipú hacia el Mundo.
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