Llevamos casi 23 años de pseudodemocracia, y seguimos regalando, botando nuestro dinero, nuestros esfuerzos, sacrificios propios y de la familia que formamos. ¿Es justo? Debemos hacer algo, algo ahora; organizarnos, unirnos sin rivalidades estúpidas, egoístas e infantiles. Con todo lo que vivimos y aún no hemos crecido. Si no lo hacemos por nosotros, hagámoslo por nuestros hijos. Unirnos sin vanidades ni narcicismos, sin cobardia, sin insidia, con el pecho al frente y la cara descubierta hablando franco. Haciendo.
El 13 de noviembre de 1980, se publica en el Diario Oficial el Decreto 3500, que crea las Administradoras de Fondos de Pensiones, Instituciones Financieras Privadas, encargadas de administrar los “Fondos y Ahorros de pensiones”. Su misión es velar por la seguridad de éstos para asegurar al trabajador una “pensión digna” al llegar a la vejez, o en el caso de sufrir una invalidez o dejar sobrevivientes. Ahhh… muy lejos de la verdad.
La “rentabilidad” informada por las 7 AFP existentes hoy, a la Superintendencia de AFP, muestran en el período de febrero 2011 a enero 2012 una rentabilidad negativa en el “fondo A”, que va desde -7.40% al 9.48%; en el “fondo B” -4.56 a 6.22; en el “fondo C” -1.14 a 2.72, una rentabilidad positiva de +0.58 a 2.63, y “fondo E” de +5.69 a 8.30. Estos números pasan frente nuestro como ver pasar un heladero. Comentamos, no indagamos.
Si usted, si yo, si ustedes tienen en su “Cuenta de Capitalización” 10, 20 o 30 milloñes de pesos -en los mejores casos -, quiere decir que perdió 1, 2 o 3 millones de pesos, que perfectamente puede significar para usted, dependiendo del sueldo que perciba, haber perdido desde 1 a 3 o más años de imposiciones, como si no hubiese trabajado o se hubiese ido al Caribe.
El valor actual del “Fondo de Pensiones de todos los chilenos”, o sea nosotros, es de $73.785.349 millones al 29 de febrero recién pasado. Y respecto al mes de febrero del 2011 este se incrementó en $4.827.750 millones, equivalente al 7% de nuestro “capital”; pero lo que le llega al pueblo de “variación real”, un 2.5%.
Si vemos los Capitales iniciales “históricos”, la “rentabilidad real” para el “fondo A” es de 71.92%, pero los índices financieros nos dicen 8,13%; y para el “fondo B” 54.02%, nos dicen 6.43%. Al aumentar en más de un 50% los “capitales” tendrían que haber aumentado en la misma proporción nuestros “fondos”, ¿no cree usted?
Nos dicen que la edad promedio de sobrevivencia de los “afiliados” es de 85 años, y las mujeres un poco más. Sin embargo al revisar las estadísticas la mayor cantidad de defunciones en los hombres va de los 65 años a los 75, y las mujeres de los 60 a 70 años. De acuerdo a la cantidad de afiliados hombres – 267.536- hoy sobreviven a los 80 años 6.626 pensionados, equivalente al 2.48%, y en el caso de las pensionadas con un universo de 412.540, la tabla muestra +76 -mayores de 76- 52.456 , siendo esto 12.72%, pero no mayor a la sobrevivencia del hombre.
Las cotizaciones son descontadas del sueldo de los trabajadores en pesos, con el poder adquisitivo del momento; su liquidación dice pesos ($) y para valorizar su capital se hace entre UF y cuotas (valores de las acciones en las que invierten su dinero). Su cotización no se mide en UF cuando va a su fondo de pensiones, por lo tanto no se refleja en sus ahorros un reajuste que absorva la inflación interna del país, porque si hace 5 años usted compraba un kilo de pan con $500, hoy lo hace con $1.000, ya su dinero se ha desvalorizado a la mitad. Se han fijado en las pizarras de los bancos donde ofrecen para los depósitos a plazo -empezando por el de 31 días- que ofrecen reajuste en “UF” + “la Tasa de Interés”, con estos conceptos juegan bancos, financieras y casas comerciales, las isapres aplican sus planes valorados en “UF”, y nosotros pegados al peso devaluado. Piense si usted, ha ahorrado en su fondo cotizaciones por un monto de $600.000 al año, y el “reajuste le entregará $ 72.000, y sumamos a eso una tasa de interés que iguala o supera estos 72.000 pesos, y como usted no podrá girar hasta su jubilacion le dan la tasa más alta de ínteres anual, este podría ser igual o superior al reajuste. ¿Cuándo una AFP ha devuelto tanto?
Nuestro capital se devalúa, pagamos todos los costos, entregamos nuestros ahorros previsionales sin poder decidir la institución que nos dé fe, capitalizan las utilidades (con nuestro dinero) y sociabilizan la deuda (con nuestro dinero, aplicándonos la rentabilidad negativa). NO tenemos acceso a nuestro “capital” hasta la edad de pensionarnos.
Al llegar la edad legal de pensión contamos con algunos millones, sacrificio y esfuerzo de los mejores años de nuestra vida, y nos enfrentamos a la más defraudante de nuestras esperanzas, accedemos a “nuestra pensión casi miserable”, enfrentando la decisión si quedarnos en una AFP hasta que el fondo termine, o huir a una Compañía de Seguros, que aunque nos ofrece una pensión algo más baja, lo hace de manera “vitalicia”. De quedarnos voluntaria o involuntariamente en una AFP, al extinguirse “nuestro Fondo” seremos candidatos para una pensión asistencial ($60.000 aprox.) a la que accederemos siempre y cuando en la familia existan ingresos mínimos y/o cesantía, para lo cual nos pedirán la famosa “Ficha de protección Social”. ¡Prometedor!
¿Por qué se menospresia tan bajo el dinero del trabajador, si es dinero igual, si del momento que la AFP o la Compañía de Seguros ingresa estos milloncitos a sus arcas, ya comienza la inversión con una variada diversificación y sectorización, en diferentes regiones, y que a sus accionistas retornan multiplicado por 2, 3, 5, 10, en 3, 5, 10, o más años. ¡Cúal es la diferencia del dinero de los acaudalados y del proletario! -proletario es todo aquel que trabaja por su sueldo, sea un jornal o un médico, un abogado, un arquitecto, etc.-.
Ahora en términos reales: ¿sabe usted con cúanto debe contar para su pensión? Un ejemplo muy veraz, si no me cree: vaya y pregunte en la fila de pensionados los días de pago.
Para obtener una pensión de UF 5, esto es aproximadamente $112.000, debo tener en mi “fondo de capitalización” $22.500.000, además de la “edad legal de pensión”. Saque la cuenta. Por cada UF de pensión que desee obtener necesita $4.500.000, que si los tuviese a mano, ¿no los invertiría en un negocio, o pequeña empresa, pagaría su casa, o la educación de sus hijos?
Llevamos casi 23 años de pseudodemocracia, y seguimos regalando, botando nuestro dinero, nuestros esfuerzos, sacrificios propios y de la familia que formamos. ¿Es justo? Debemos hacer algo, algo ahora; organizarnos, unirnos sin rivalidades estúpidas, egoístas e infantiles. Con todo lo que vivimos y aún no hemos crecido. Si no lo hacemos por nosotros, hagámoslo por nuestros hijos. Unirnos sin vanidades ni narcicismos, sin cobardia, sin insidia, con el pecho al frente y la cara descubierta hablando franco. Haciendo.
* Dueña de casa. Vive en Ciudad Satélite.
Dueña de casa. Vive en Ciudad Satélite.
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