El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, acusó a los prorrusos de bloquear información acerca de la caída del avión malasio. En este avión viajaba una comitiva de científicos que estudiaban una cura para el sida.
Obama exigió a Rusia, específicamente a Putin, hacer que los prorrusos de Ucrania permitiesen la investigación sobre lo sucedido con el avión, el cual cayó por un misil, el cual habría sido disparado por los separatistas prorrusos mediante armamento que Rusia les entregó.
Obama dijo:
¿Qué es lo que están tratando de ocultar? Lo que necesitamos es acceso inmediato y sin obstáculos al lugar de los hechos. El presidente ruso, Vladimir Putin, tiene responsabilidad directa para obligarles a cumplir con la investigación, es lo mínimo que pide la decencia. Debemos asegurarnos de que la verdad sale a la luz (La Tercera).
Ya fuese por estas palabras o por la mediación de Rusia, los rebeldes prorrusos, por medio de su líder, entregaron dos cajas negras del avión malasio MH17:
El líder rebelde Aleksander Borodai hizo la entrega de las dos cajas negras en una reunión en la ciudad de Donetsk. El jefe de la delegación de Malasia dijo a periodistas que las grabadoras están “en buenas condiciones” (BBC).
Es interesante notar que cuando el avión cayó, Putin iba en otro vuelo. Las interrogantes quedan abiertas: ¿querían acaso los prorrusos derribar el avión de su propio líder Putin? ¿O fue otra agrupación que erró el blanco?
[Imagen: Memorial improvisado en el Amsterdam Schiphol Airport por las víctimas del vuelo MH17 de Malaysian Airlines.| (CC) Roman Boed].
Deja una respuesta