Esta tarde se empezó a cerrar no se sabe por cuánto tiempo, una historia cívica que ha convocado al país durante cuatro años a un debate, a veces con capítulos expectantes, esperanzadores de llegar a acuerdos trascendentales, fijar una ruta y crecer como país. En otras ocasiones -quizás las más- a episodios cansadores y distantes del interés ciudadano, con desprecio por la práctica y los practicantes de la política, sin edades ni caricaturas de superioridad de ningún tipo.
El “corsi e ricorsi” el ida y vuelta de la historia que refirió el filósofo napolitano Giambattista Vico, parece ser una buena forma de tratar de explicar lo inexplicable que pueden llegar a ser propuestas de “bien común” por las que un día hay acuerdo sustantivo y firme de todos los ciudadanos, para elaborar una propuesta de futuro moderna, inclusiva, que una y renueve el interés por una sociedad mejor y que luego 4 años después de su proclama excitada y convencida retrocede a su estado inicial que se quiso cambiar para que nada cambiara. Esto ha pasado en el intento de elaborar una nueva constitución para Chile, que tiene su origen mágico en las dificultades y peligros que enfrentaron la clase política y la institucionalidad, producto del malestar social expresado en el denominado estallido social de 2019.Pareciera ser que ya pasó suficiente tiempo para sacarse las máscaras de la farsa que rodean los tratos e intereses políticos y superaron los miedos para retomar la práctica habitual de atrincheramiento ideológico.
Ahora bien la democracia se vive, pero no se siente, su pulso es débil y sus fórmulas parecen insuficientes, o bien está superada por el afán de una sociedad individualista, donde cada cual aspira a escalar lo más alto que pueda, no importa si alguien a su lado se queda atrás o le sirve de plataforma.
¿En qué lugar del ida y vuelta de la historia, está el secreto, para poder escribir algo tan simple y complejo a la vez
¿Qué o Quién ganó después de estos 4 años de ida y vuelta?
La constitución vigente (de Pinochet o Pinochet Lagos, según consuelo de los más progresistas) que se quería cambiar, seguirá gozando de buena salud.
La Batalla, de Maipú hacia el Mundo.