El Padre Marcelo Aravena Gutiérrez asumió el 4 de junio como nuevo rector del Templo Votivo de Maipú, un hombre cordial, reflexivo, apasionado en las respuestas que tocan su fe, su vocación, le decimos con respeto que no sabemos si decirle el Padre o el cura viajero, y se apresura en decirnos que ha sido “un misionero urbano”. Esto, a propósito de su extenso periplo por países como Alemania donde estuvo 14 años, además de Brasil, Estados Unidos, donde hizo escalas en Texas, Wisconsin, La Florida y en Argentina por 5 años.
Refuerza su peregrinar acotando que: “Llevo ya 37 años de Padre de Schoenstatt y siempre mi trabajo ha sido atender las comunidades en diferentes países, pero ahora a partir de este año, del 23, estoy aquí en el Santuario con el encargo y la responsabilidad del Santuario Nacional.”
Hace una pausa y se ilumina su rostro para decirnos que tiene a su mamá de 95 años, una hermana y cinco sobrinos.
Así entramos a una conversación que se va haciendo interesante, enfrentados a una persona de grandes experiencias y convicciones, que seguramente se fundieron y moldearon mientras realizó todos sus estudios teológicos en la Universidad de Münster de Alemania.
laBatalla: Padre, Usted forma parte de la comunidad de Orden de Schoenstatt ¿Cuáles son sus principios, sus referencias?
P.Marcelo: “Bien, Schoenstatt es un movimiento de iglesia católica, que está compuesta por personas consagradas y laicos. Y tenemos diferentes comunidades que la componen. Tenemos sacerdotes, tenemos religiosas, tenemos laicos que se consagran 100% a la obra y tenemos comunidades de matrimonio, de profesionales y juventudes, tanto masculinas como femeninas, en fin, todo lo que hay en la sociedad. Tenemos comunidades que se alimentan y viven de un mismo carisma. Y el carisma de Schoenstatt es estar siempre buscando la voluntad de Dios a través de una fe práctica en la Divina Providencia, y descubrir qué es lo que Dios quiere de ti, y todo eso con un marcado sello Mariano, de amor a María, tan fuerte que en el centro de nuestra espiritualidad tenemos lo que se llama la alianza de amor, hacemos una alianza con María, una consagración a María que marca la vida de cada uno.”
laBatalla: ¿Y cómo surge el nombramiento de rector del Templo Votivo de Maipú, cuál es la responsabilidad que este cargo implica?
P.Marcelo: “El que me nombra a mí como rector del santuario es el arzobispo de Santiago, en este caso es el cardenal monseñor Celestino Aós, y lo hizo por seis años. Ahora bien, el superior de mi comunidad, me colocó a disposición de la Iglesia diocesana para que yo estuviera disponible.”
laBatalla: ¿Qué referencia ha tenido usted, padre? ¿Qué conocimiento, qué vínculo? Con la basílica, con el templo Votivo?
P.Marcelo: “Bueno, yo soy chileno, a pesar de los viajes. Y desde muy joven, desde que estaba en el liceo y después en la universidad para mí el Santuario Nacional de Maipú siempre fue un concepto y yo vine un par de veces para acá también a conocerlo. Supe también siempre que este santuario es fruto de la promesa del pueblo de Santiago que después asume el general O’Higgins y como expresión de gratitud por la batalla de la victoria que le dio la independencia a Chile.”
laBatalla: Y hoy día, ¿tiene alguna referencia de cómo está vinculado el templo con los maipucinos/as?
P.Marcelo: “Bueno, yo estoy en Maipú ya hace un mes y algo, pero para donde voy, los diferentes barrios, especialmente en el casco histórico, en el centro, me doy cuenta de que el templo Votivo, el santuario está presente en todas partes y ahí yo me doy cuenta de que hay un vínculo no solo geográfico sino que también afectivo del maipucino y maipucina respecto del santuario nacional. Maipú es una comuna histórica y el maipucino está consciente de eso. Aquí se generó la independencia definitiva de Chile Y producto de eso, fruto de eso, emergió esta enorme basílica, este santuario, para honrar esa promesa, para agradecer a María del Carmen y a Dios por esa victoria. Y se lo transformó luego en un santuario nacional que trasciende la promesa. Y para no ser una cosa histórica, objetiva, puntual, sino que es un lugar de gracias que quiere bendecir a todo Chile. Y por eso el Santuario Nacional está en Maipú es un símbolo para irradiar su realidad a todo Chile. Y un patrimonio muy importante además.”
laBatalla: Hay un legado importante con una batalla tremenda, épica en el mundo, que es la batalla de Maipú, y en la que se relaciona el templo con la ciudadanía, en la promesa, esto es una expresión de religiosidad, de ciudadanía y también de expresión militar. ¿Cómo piensa usted que convive todo esto en el marco de la historia o en lo que hoy día es trasladado a la realidad nacional?
P.Marcelo: “Bueno, es una cosa que a mí personalmente me llama la atención. Aquí confluyen diferentes actores de la sociedad chilena. Es un lugar de reunión, un lugar que convoca a diferentes grupos. La semana pasada no más el sábado (8 de julio), teníamos aquí el santuario lleno, repleto de soldados, mujeres y hombres, con más de 800 efectivos, haciendo la vigila de armas previo al juramento de la bandera. El próximo domingo (16 de julio) va a tener al pueblo peregrino que llega acá a expresar gratitud, a alabar al señor, a renovar su fe, que no son precisamente militares, sino que son peregrinos que vienen y van, va y viene al santuario.”
“Y todos los días están llegando parroquias, cursos de colegios, parroquias, cursos de colegios, peregrinos individuales, familias, jóvenes, enfermos, sanos. Me llama la atención eso, de que este lugar, que es un lugar religioso por su naturaleza, se manifiesta, se revela como un centro de espiritualidad para muchos chilenos, uniformados y no uniformados, para católicos fervientes como para católicos en general, para gente que viene por turismo religioso como también para muchos vecinos de Maipú que fieles a la Virgen del Carmen vienen a su santuario, a su casa.”
“Nosotros decimos que el santuario es la casa de la madre. La casa de María, la casa de todos. Y están todos bienvenidos. Sin ningún tipo de discriminación, sin ningún tipo de diferencia. También tenemos la alegría, el domingo pasado, por ejemplo, teníamos un servicio religioso especialmente dedicado a la realidad del migrante. Y saludamos a migrantes de más de 10 nacionalidades que estaban presentes aquí en el santuario.”
laBatalla: ¿Y cuál es la visión que tiene la iglesia respecto de los migrantes?
P.Marcelo: “Mira que interesante, porque es un tema contingente, El tema de la migración es un tema universal planetario. Se calcula que en este momento en el mundo están desplazándose de un lugar para otro unos 70, 80 millones de personas. O sea, el problema migratorio de salir de tu país e irte como exiliado o refugiado a otro lugar, lo que se llama el desplazamiento, es multitudinario y está afectando todos los continentes. A Chile también le llega Y como nunca antes en la historia de Chile estamos experimentando una inmigración de migrantes que llegan de otros países a enriquecer nuestra realidad nacional.”
laBatalla: ¿Cuál es la mirada de la Iglesia en este fenómeno?
P. Marcelo: “Absolutamente positiva. La iglesia no hace discriminación de ningún tipo en ese sentido. Todos somos hijos de Dios. Y por ser hijos de Dios todos tenemos la misma dignidad, el mismo valor humano y no importa el origen, no importa tu raza, no importa el color de tu piel, no importa tu cultura, todo tiene una riqueza y debe ser respetada y debe ser acogida y promovida por eso fue muy lindo el domingo aquí en el santuario cuando vi entrar como 10 banderas de diferentes países en el servicio religioso Así que es la casa de la madre, la casa de María, donde todos tienen su lugar. Y la iglesia tiene un cariño especial por el migrante, Porque el migrante que sale de su país, sea cual sea el motivo, tiene una pena, tiene un dolor, tiene un sentimiento, puede ser de rabia, puede ser de soledad, puede ser de nostalgia, puede ser de tristeza. El migrante siempre tiene algo por el cual sufre, es reclamar porque dejó su tierra, dejó su casa, dejó su propiedad, dejó sus familiares, entonces siempre hay un dolor vinculado. Y ahí la iglesia, que quiere ser madre, acoge a esas personas que están sufriendo esa situación, el ser migrante no es fácil y especialmente cuando hay lugares donde no hay acogida sino hostilidad entonces el castigo es doble al salir de tu país por el motivo que sea y ser mal acogido en el país donde estas actualmente.”
laBatalla: Padre, surge aquí necesariamente una pregunta sobre un episodio o una circunstancia que tal vez es muy triste, derivada de los abusos que han cometido miembros de la iglesia. Esto de alguna forma pudo haber dañado la fe y la confianza de las personas ¿hay un camino de perdón padre de restauración de renovación de esa fe que se pudo haber lesionado por aquellos abusos que efectivamente se han cometido?
P.Marcelo: “En primer lugar, yo creo que hay que dejar claro que todo tipo de abuso, sea cual sea, es condenable. Ya sea en la iglesia o fuera de iglesia, en la casa, en la familia o en la escuela, o en el cuartel militar, donde sea, o en la fábrica, en el lugar de trabajo, cualquier tipo de abuso es condenable, abuso emocional, abuso psicológico, abuso de poder, abuso de conciencia, abuso sexual, abuso verbal, es condenable. Tristemente, dentro de la iglesia ha habido casos en los cuales algunos sacerdotes se han visto envueltos como perpetradores culpables que han cometido delitos, los cuales han merecido un juicio tanto civil como canónico con las sentencias respectivas.”
“Eso ha traído o ha significado un fuerte daño, un grave daño en la confianza del fiel hacia el sacerdote y hacia la iglesia. Entonces la iglesia junto con pedir perdón de rodillas e implorar compasión de su pueblo, se ha puesto en campaña para recuperar esa confianza, para devolver la confianza al pueblo. ¿Cómo? Primero, a través de un servicio fiel, abnegado y generoso a la gente. Segundo, llevando a todos los sacerdotes y a todas las personas vinculadas a trabajos con menores, personas vulnerables, a instrucciones permanentes sobre prevención, cuidado y protección de ambientes sanos. Porque el daño que se hizo y que se hace es gravísimo y eso por supuesto ha quebrado la confianza de mucha gente y le ha costado volver, volver a creer no en Dios sino que volver a creer en la institución, iglesia, y volver a creer que el sacerdote está para servir, no para abusar.”
“Está para ayudar, no para aprovecharse. Es todo lo contrario. El sacerdote debe estar dispuesto al martirio, a morir por su gente, y no para abusar su gente. O sea, el que abusa es todo lo contrario a lo que es Jesús, todo lo contrario a lo que es Jesús el Maestro. Entonces lo que tiene que hacer el sacerdote ahora es ser otro Jesús para que la gente vuelva a creer en Él, a confiar en Él. Y es un desafío muy grande para nosotros. Nos duele muchísimo lo que ha ocurrido, nos hiere, No sólo por la víctima, por el daño de la víctima, también por el daño que hemos hecho en nuestra propia vocación sacerdotal a la iglesia. Es un dolor doble por la víctima que sufre en primer lugar y también por el daño que se le hace a la institución, a la iglesia que es la madre de los creyentes.”
laBatalla: ¿Usted Padre, siente que la Iglesia como institución tiene un viaje concordante con los tiempos? Me refiero fundamentalmente a algunas visiones que tuvo históricamente por ejemplo respecto de la paridad de género, y en general de los derechos que reivindican distintos movimientos que han sido postergados.
P. Marcelo: “Bueno… todo ser creado es una criatura de Dios, y como tal debe ser respetado, debe ser acogido, debe ser escuchado, debe ser tratado como tal, como hijo, como hija de Dios. Sin importar su sexo, sin importar su raza, ni su cultura, sus costumbres, porque es hijo de Dios.”
Ahora, respecto de la condición sexual, el Papa ha sido claro. El Papa Francisco no condena a nadie, ha dicho: ¿Quién soy yo para condenar?, si soy tan humano como otros.
Entonces dicen que la Iglesia discrimina a los homosexuales, por ejemplo. El Papa tiene colaboradores homosexuales en el Vaticano. El otro día nada más, en el diario La Segunda, aparece en la entrevista Juan Pablo Cruz que es colaborador del Vaticano, del Papa y él confiesa que es gay.
Otra critica, que hay pocas mujeres con poca responsabilidad, Quíta a las mujeres de aquí y colóqueme a solo hombres. No va a funcionar. Mi secretaria pastoral, la que está erncargada de toda la parte pastoral, de celebración, es una mujer. Ella me coordina. Yo soy el responsable, al final, claro, pero ella es la que es fundamental. ¿Cómo funciona este santuario? Funciona gracias a la entrega de mujeres que trabajan diariamente.
laBatalla: Padre Marcelo, ¿ha disminuido, se ha estancado la vocación sacerdotal y el ingreso?
P. Marcelo: Hay una disminución. Hay disminución por varios factores. Uno, por toda la crisis de la Iglesia, que la misma ha sido culpable. Segundo, porque actualmente en el mundo, concordamos en ese análisis, que ha habido como una corriente cultural de secularización, decimos, donde lo espiritual o lo religioso no tiene relevancia en la vida de la gente. La gente se ha descreído, ha dejado de creer, o cree en un Dios que ella o él se fabrica. Entonces claro, hay lo que llamamos secularización. También la crisis de la iglesia. Y también, y un factor muy importante, es que a la iglesia tal vez le ha faltado agilidad y creatividad para ir acomodándose a los tiempos modernos y tener un diálogo creativo y efectivo con los jóvenes, por ejemplo.
La juventud es el futuro. Pero no quieren participan en grupos donde se sienten comprometidos o obligados a algo. Los jóvenes quieren estar libres y hacer lo que ellos quieren. A la hora que quieren, cuando ellos quieren, cuando tienen el ánimo de hacerlo. Entonces, claro, si tú no eres de una organización, no quieren estar metidos, encorsetados en una organización. Y claro, si tú estás en una institución, en una organización, tienes que comprometerte, tienes que firmar, y tienes que participar y cumplir. Y es súper difícil. Y no solamente pasa en la iglesia, sino que en muchas organizaciones culturales, políticas, sociales. Los leones, los rotarios, los partidos políticos, los clubes, y por supuesto la iglesia y los seminarios.
LaBatalla: Pero para transformar esa realidad, Padre, hay algunos que las circunstancias los ponen en una posición de líderes, de su congregación, de su institución. El líder tiene un desafío mayor, ahora, como responsable de este templo, de los fieles, de la renovación de la fe, la esperanza de la que usted nos habla. ¿Qué espera lograr en su fuero interno? ¿Qué ha pensado de esta labor pastoral?
P.Marcelo: Bueno, eso no lo pienso solo yo, sino que con el equipo de padres de Schoenstatt que trabajamos aquí en el santuario. Ya, somos varios padres, ¿sabes? Nosotros queremos desde el santuario nacional desde este símbolo nacional dar un mensaje no solo a Maipú sino y a todo el Chile un mensaje de unidad y de esperanza. Especialmente ahora que vamos a cumplir 50 años de la consagración del santuario. de noviembre a noviembre, de noviembre de 2023 a noviembre de 2024, y lo hemos querido resumir en un lema que dice contigo Virgen del Carmen, 50 años esperanza para Chile. Queremos dar confianza a nuestro pueblo, queremos entregar un mensaje de esperanza para Chile, que sufre antagonismos, divisiones, inseguridades, violencia y tantas cosas que impiden que como país seamos más libres.
LaBatalla: Pero para transformar esa realidad, Padre, hay algunos que las circunstancias los ponen en una posición de líderes, de su congregación, de su institución. El líder tiene un desafío mayor, ahora, como responsable de este templo, de los fieles, de la renovación de la fe, la esperanza de la que usted nos habla. ¿Qué espera lograr en su fuero interno? ¿Qué ha pensado de esta labor pastoral?
P. Marcelo: Bueno, eso no lo pienso solo yo, sino que con el equipo de padres de Schoenstatt que trabajamos aquí en el santuario. Ya, somos varios padres, ¿sabes? Nosotros queremos desde el santuario nacional desde este símbolo nacional dar un mensaje no solo a Maipú sino y a todo el Chile un mensaje de unidad y de esperanza. Especialmente ahora que vamos a cumplir 50 años de la consagración del santuario. de noviembre a noviembre, de noviembre de 2023 a noviembre de 2024, y lo hemos querido resumir en un lema que dice contigo Virgen del Carmen, 50 años esperanza para Chile. Queremos dar confianza a nuestro pueblo, queremos entregar un mensaje de esperanza para Chile, que sufre antagonismos, divisiones, inseguridades, violencia y tantas cosas que impiden que como país seamos más libres.
Recordemos que este santuario es fruto de la lucha de miles de soldados que dieron su vida por un Chile libre. Derramaron su sangre por un Chile libre. Tal vez hoy día no vamos a derramar la sangre por un Chile libre, pero necesitamos un Chile libre de cadenas. Las cadenas del odio, las cadenas de la violencia, de la delincuencia, de la intolerancia, de la falta de respeto, de las ofensas, del fanatismo., Y queremos desde aquí, desde el santuario, comunicar eso. Y desde este santuario, que es la casa de la madre, María, la madre de todos los chilenos, patrona de Chile, sea ese lugar donde se irradie esa esperanza, desde donde se irradia esa esperanza para toda nuestra nación, por un Chile libre, libre de verdad, que no va a ser a través de las armas, sino que a través del amor fraternal y de la amistad social y de la convivencia pacífica entre chilenos y chilenas. Por eso, contigo, Virgen del Carmen, 50 años de esperanza para Chile.
laBatalla: Finalmente, ¿algo especial que quisiera decir a los maipucinos y maipucinas?
P.Marcelo Claro. Quiero invitarlos a todos, amigos, amigas, vecinos, vecinas, queridos todos de Maipú. Vengan al santuario. Vengan a buscar las gracias, las bendiciones, vengan a renovar sus fuerzas, vengan a buscar hogar aquí en el santuario de María del Carmen y para salir renovados, fortalecidos, energizados, para hacer de su vida algo positivo, algo lleno de esperanza, para construir una sociedad mejor. Para eso necesitamos fuerza interior, necesitamos energía interior, necesitamos espiritualidad. Esa energía que nace desde dentro y que te lleva a hacer cosas lindas para afuera. Queremos que sea un lugar de acogida, de transformación y de envío a la calle, al mundo. Ahí es donde tenemos que estar, transformando el mundo.
La Batalla, de Maipú hacia el Mundo.