El pequeño Jonathan Velásquez recibía a sus seis años su primera bicicleta y a sus vecinos de las calles Hermanos Carrera con General Bueras, en el Paradero 15 de Pajaritos, los desafiaba para competir por quién era el más rápido del sector.
A los ocho años en 2000, un tío materno le regaló una bicicross y compitió en la primera cicletada de Maipú, que se realizó en la distancia entre el Estadio Santiago Bueras y el Cerro Primo de Rivera. Obtuvo el primer lugar, donde recibió un diploma entregado por el alcalde de la época, Roberto Sepúlveda.
Aquel sería un gran espaldarazo para seguir una carrera en el ciclismo, que antes tendría una estación en el triatlón, donde competiría contra Gaspar Riveros, hermano de Bárbara. Una lesión en los meniscos, a los catorce años, le truncó su desarrollo en los deportes que implican alto impacto.
El ciclismo lo esperaría con las puertas abiertas en un club del Parque O’Higgins y también las sabias enseñanzas del entrenador Miguel “Topo Giggio” Droguett. En 2002, el deportista clasificó a la Selección Nacional Regional y se adjudicó durante dos años consecutivos los Juegos Bicentenarios.
En 2006, a los catorce años, Velásquez se integró a la filas del Club Quinta de Tilcoco, con sede de entrenamiento en la ciudad de Curicó. Gracias a sus excelentes calificaciones y a un mejor rendimiento deportivo, el colegio Instituto América de Maipú le dio una beca, un permiso para recuperar clases y facilidades para dar exámenes libres. En 2008, se unió al emblemático Club Ciclista Chacabuco, con laboratorio en el Velódromo del Estadio Nacional. En 2010, clasificó a los Juegos Panamericanos Junior de Ciclismo en México, donde se consagró campeón en ruta. En 2012, clasificó a la Vuelta Ciclista de Chile, siendo ésta, la primera vez que su club clasificaba a esta competencia. En dicha tradicional cita, el maipucino logró el quinto lugar en la categoría sub-23.
A principios de 2013, el ciclista alcanzó dos etapas en ascensión de la Vuelta a las Termas de Chillán. Sus logros no pasarían inadvertidos, y ese mismo año el avezado ciclista Gonzalo Garrido lo contactó para reclutarlo al team Clos de Pirque-Trek. A fines de dicha temporada, se adjudicó el Desafío Trek (Alta montaña) que comprendía la distancia desde el Mall Sport en Avenida Las Condes hasta Farellones. En enero de 2014, Velásquez consiguió la Vuelta de la Leche en Osorno, con ascensión al volcán (120 kilómetros recorridos en plano y 35 kilómetros en subida). Ese mismo mes se adjudicó la ascensión Villavicencio en Mendoza, Argentina, con ciento ochenta kilómetros recorridos en plano y veinticinco kilómetros recorridos en subida. Pese a su sobresaliente palmarés, no fue considerado en la selección nacional para participar en los Juegos Suramericanos Santiago 2014 y tampoco para el Tour de San Luis en Argentina, este último uno de los grandes eventos ciclísticos y deportivos de la región.
En 2014, el entrenador argentino Sergio Gili lo ratificaría para el Panamericano específico de México y para las vueltas de Rio Grande do Sul y para la vuelta de Paraná. En tierras aztecas las cosas no anduvieron bien, ya que pinchó un neumático y Chile quedó eliminado.
El ciclista se tomó los años sabáticos desde fines de 2015 hasta 2018, retomando la actividad en 2019. En esa temporada consiguió el Campeonato Nacional de Ruta Elite Laboral.
En los siguientes años, las malversaciones en su federación, impidieron la realización de grandes eventos de nivel nacional como La Vuelta de Chile (Tendría 9 participaciones). La pérdida de credibilidad, bloqueó los financiamientos públicos. Tampoco hubo retorno publicitario, y se terminaron los equipos pagados y los deportistas se detuvieron que emplear en diferentes rubros. Desde 2016, Jonathan trabaja en mecánica de bicicletas, prestando servicio a grandes marcas.
Actualmente, Jonathan Velásquez tiene veintiocho años, trabaja en la tienda Trek en la ruta 68, labor que combina a diario con los entrenamientos.
Hace cinco años, fundó una escuela gratuita de ciclismo de ruta llamada Mc Cycling Maipú. Este proyecto no tiene financiamiento, es un proyecto de fomento y formación de ciclismo sin fines de lucro. No ha recibido de privados ni públicos. La idea del deportista es tratar de llegar a niños de escasos recursos y masificar su disciplina en la comuna. Velásquez sueña con un cupo en los Juegos Panamericanos Santiago 2023. ¿Por qué no si tiene las alas y las ruedas para volar?
José Antonio Lizana Arce es un escritor maipucino y periodista deportivo, autor de seis libros sobre la memoria deportiva en Chile.
Ceacheí. Palabra de campeón (2008), Rayando la cancha (2009), Mojando la camiseta (2010), Pisando la pelota (2014), Pelota en la(s) red(es) social(es) (2018) y Más allá de la cancha (2022).